Nuevos retos de fe para el pueblo cristiano, “es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve, Hebreos 11:1.”

Muchos pensarán que es una locura, que un país pobre y en crisis con pocos feligreses logre edificar un Centro de Convenciones, pero para Dios nada es imposible; mientras nos mantengamos unidos, clamando de rodillas y apoyando a nuestros hermanos haitianos seremos testigos de las grandes cosas que Jesucristo hará.

En medio de este evento espiritual, el Supervisor Nacional compartió varios puntos del proyecto y la necesidad de apoyar. También,  ánimo e instruyó a la congregación a través de las enseñanza bíblica acerca del “Rol de la madurez en la credibilidad”, de “Mirar para entender.” Asimismo, levantó un clamor de fe ante el proyecto de construcción del Centro de Convenciones con capacidad para tres mil personas, dormitorios y sanitarios para albergar a mil personas, y establecer la Oficina Nacional del Movimiento Misionero Mundial en Haití. Sigamos oraciones por Haití.